LA BELLEZA

BREVE HISTORIA DE LA BELLEZA


Los tratadista han ensayado, en vano, ponerse de acuerdo sobre el problema de la belleza.
Platón, por ejemplo, creía que la belleza es el orden, la simetría, y la delimitación.
Para San Agustín es el esplendor del orden y para Santo Tomas y los escolásticos confunden lo bello con lo bueno, recalcando del contenido moral y sobreponiendolo al artístico.
En épocas modernas, Bentham y los utilitaristas identifican utilidad con belleza. Para Kant, la belleza reside solamente en el espíritu que la contempla, o sea, que es totalmente subjetiva.
En suma, cada escuela, cada esteta mira la belleza con un criterio unilateral; pero la belleza contiene a todas las escuelas, y constituye un grave error quererla aparcelar, mutilar, cuando ella es un todo homogeneo y compacto.

Sea cual fuere la esencia de la belleza, debemos,  sin embargo, convenir en una formula o definición provicional  que sirva de punto de referencia. Con tal fin, podemos decir que la belleza es: Todo lo que contemplado produce una impresión de agrado o deleite noble, libre y desinteresado.
Ese deleite brota  de la mera contemplación del objeto y no viene motivado por las ventajas que pueda reportarnos ; no cabe, pues, confundir lo bello con lo simplemente agradable, ni mucho menos con lo útil.
Por supuesto, que en la estimación de la belleza influye no poco la apreciación personal, pero el hecho de que complazca a unos lo que deja indiferente a los demás, se debe, en gran parte, a la diversa capacidad de cada cual para percibir la belleza, y a la mayor o menor educación estética de los individuos.

DIVISIONES DE LA BELLEZA

  • Belleza natural u objetiva: que es la que encontramos en los seres y fenómenos de la naturaleza. En ella no interviene para nada la mano del hombre, eje: un paisaje, una puesta del sol, etc.
Belleza artística o subjetiva: Ha sido creada mediante una técnica (ingenio del ser humano) , y se caracteriza por que transforma la realidad natural. Es la propia de las obras de arte con las que sea ha querido expresar una visión personal del mundo.





GRADOS DE LA BELLEZA

La cuestión de los grados de la belleza, mas que subjetiva en el sentido de que cada uno los aprecia según su manera de sentir, es arbitraria y metodológica. Sin embargo,  parece conveniente, por fines pedagogicos, clasificar los grados de la belleza como tradicionalmente se ha hecho.

  • Lo sublime: cuando la belleza nos impresiona por su inmensidad o grandeza, despertando en nosotros una sensacion  de asombro gozo y maravilla.
  • Lo bello: Revela equilibrio entre fondo y forma. Lo que agrada al ser contemplado.
Lo gracioso: Es la belleza de la expresión, del movimiento; lo que tiene cierto atractivo; posea o no algún grado de belleza. Una mujer es graciosa cuando,  aun siendo fea, posee actractivo; los movimientos de un niño son graciosos.

FINES A LO BELLO

  • Lindo o bonito: Se denomina así al objeto que posee los elementos de la belleza pero en pequeñas proporciones. Lo bonito reside ante todo en la forma; supone destreza en el ejecutor y propósito de agradar. 
  • Cómico: es lo que nos causa regocijo y se produce por un constraste inesperado entre lo que son las cosas en realidad y lo que creemos que deben ser. Los payasos acuden a este recurso de inesperado quebrantamiento del equilibrio para povocar la risa de los espectadores.
  • Ridículo: Se da cuando a lo cómico se añade una idea de desproporción. Así, una persona que, por querer ser muy elegante, rebasa el limite y cae en la exageracion. No hay, pues, que confundir lo cómico con lo ridículo; mientras esto inspire conmiseracion o burla, lo cómico produce placer estético.
  • Humorístico: Podemos decir que es la combinacion de un elemento agradable y otro desagradable, de los cuales uno es sentimental; de este contraste surge la sonrisa. Hay que considerar el humorismo como un movimiento literario y artístico de nuestra transcendencia de muchisima influencia en la actualidad. 
  • Lo satírico: Pone de relieve, el tono de burla, los defectos de los demás y costumbre de una época. Con frecuencia, lo satírico comporta gravedad y amargura.
Lo trágico y lo patético: Lo trágico surge cuando el hombre sucumbe,  inevitablemente en su lucha contra la adversidad,  y el destino que lo domina. Despierta en nosotros una especie de terror y deseo de purificacion moral.
Cuando lo trágico no tiene tanta fuerza y se reduce solo a la composición que provoca la parecencia de un dolor humano, estamos ante lo patético.
Lo trágico y lo patético no se dan en  la naturaleza. Son concepto esencialmente humanos.

OPUESTO A LO BELLO

Lo feo: Es lo que carece en absoluto de belleza.  Consiste, por tanto, en una
inadecuación total entre los elementos formales. Sin embargo, hay que tener presente que un ser o un objeto feo de la naturaleza puede inspirar al artista, y convertirse así en una obra dotada de belleza artísticas.
 Velasque, por ejemplo, pinta en algunos de sus cuadros los monstruosos bufones de la corte. El objeto representado es feo, pero la obra es bella, por que nos produce un sentimiento estético. Lo feo se vuelve artístico solo a fuerza de la maestría.






5 comentarios:

  1. UMMM
    cuantos tipos de grado de belleza hay?mi profe dice que son 7 u 8 pero no los encuentro¡¡¡¡

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  2. Exelente trabajo, me sirvio de mucho.
    Saludos.

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  3. Luis Manteiga Pousa10 de marzo de 2023, 11:58

    Es complicado el tema.¿La belleza es algo objetivo o sólo subjetivo?¿O es en parte objetiva y en parte subjetiva?. Depende tanto de lo observado como del observador, hay una interacción. También con bastante frecuencia el canon de belleza cambia con el tiempo, va por épocas. ¿Hay, por lo tanto, una gradación en la belleza?. No lo se. Parecido pasa con otros conceptos como el de bondad, por ejemplo. Es interesante lo que dice Husserl con su fenomenología al respecto. Por otro lado, ya divagando un poco, las personas, los objetos, la naturaleza...pueden ser hermosos a simple vista pero si viesemos a todos los bichitos "invisibles" que nos rodean quizás no nos lo pareciesen tanto, porque estos bichitos, para mi gusto son francamente feos (pero ¿lo son objetivamente? ¿es algo subjetivo? ¿depende?...) aunque ellos entre si se atraen y, supongo, que a su manera puramente instintiva animal se considerarán hermosos.

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  4. En la belleza pienso que hay una dialéctica entre lo objetivo y lo subjetivo, como sostenía, me parece, Husserl. No se si en todos los ordenes de la vida, de este tipo, es así. Pero lo objetivo existe. Tengo muy claro que se puede decir, con total objetividad, que Mozart es mejor que Bisbal.

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